
La administración del sistema de tuberías y desagüe de una construcción es un proceso que no suele llamar mucho la atención, sin embargo, cuando empezamos a notar conceptos que parecen similares como cámara séptica, trampas de grasa, o pozos de bombeo, la situación se vuelve más compleja. Así puede que comiencen a surgir confusiones entre los tipos de instrumentos y construcciones que requiere nuestro negocio para mantenerse como un espacio que no represente un riesgo para Desagotes La Victoria requiere nuestro negocio para mantenerse como un espacio que no represente un riesgo para nuestra salud y nuestra generación de ingresos, y que a su vez nos permita mantenernos dentro de lo establecido por las leyes en materia de salubridad.
Aquí te mostramos las diferencias:
1. Cámaras sépticas: Lo primero que debes conocer sobre el sistema de tuberías y desagüe de tu casa o negocio, es su cámara séptica, un rectángulo (que variará en tamaño y material dependiendo del tipo y cantidad de residuo que reciba) que se encarga de almacenar las aguas residuales dispuestas a través de las cañerías de la edificación. Estas cámaras forman parte importante de aquellos negocios que no tengan acceso al sistema de desagüe municipal, recibiendo todos los desechos que puedan generar los empleados y consumidores de algún negocio, como puede serlo en un restaurante o un hotel. Lo mismo sucede con las casas que se encuentran en comunidades sin acceso a los desagües de la ciudad. Estás cámaras se irán llenando poco a poco, requiriendo un mantenimiento constante que será determinado por expertos en la materia. La acumulación excesiva de estos residuos, así como un mantenimiento pobre de la cámara, puede derivar en la generación de olores fétidos, la proliferación de plagas, e incluso el surgimiento de enfermedades e infecciones.
2. Trampas de grasa: Por su parte, las trampas de grasa tienen una tarea mucho más especializada, enfocándose únicamente en la separación del agua de los residuos sólidos y líquidos que puedan generarse de actividades como la cocina, la limpieza de alimentos, el mantenimiento de establecimientos de reparación vehicular, bares y cantinas, hoteles, entre muchos otros. Las trampas de grasa, a diferencia de las cámaras sépticas, cumplen su tarea ralentizando el flujo de agua del sistema de tuberías con el objetivo de que estas se enfríen lo suficiente para la solidificación de las grasas. Si la grasa es de baja densidad, se ubicará en la parte superior de la trampa mientras que, si es pesada, se ubicará en el fondo de la misma. Como ocurre con las cámaras sépticas, es necesario acudir a profesionales para el desagote y la limpieza de la trampa de grasa, ya que la misma no solo requiere una serie de procedimientos especializados para su vaciado, sino que además es necesario el transporte de los desechos que pueden ser peligrosos para la salud.
3. Pozos de bombeo: Los pozos de bombeo, a diferencia de los dos instrumentos mencionados anteriormente, no tiene como función la recepción de líquidos dispuestos por las tuberías, sino que se encarga de almacenar líquidos que se encuentren fuera del alcance de nuestro sistema de tuberías, ya sean aguas limpias, residuales, fluviales, entre muchas otras. Estos pozos tienen una serie de mecanismos digitales con los que pueden medir las cantidades de líquido almacenada para luego activar sus motores e iniciar el proceso de bombeo. Dependiendo del tipo de pozo que tengamos en nuestra edificación, puede que encontremos el motor sobre el pozo, dentro del mismo, así como trituradoras y bombas adicionales. Ya que los líquidos que pueden recibir estos pozos variarán de forma constante en cuanto a composición y cantidad, es necesario realizar un estudio profundo sobre las condiciones a las que se enfrentará el mismo, evitando así un mal funcionamiento en momentos importantes, e incluso la destrucción de los equipos.
Desagote, limpieza y transporte de residuos
Aunque todos estos instrumentos sean distintos y cumplan labores complementarias, la realidad es que los 3 está unidos por un factor: todos requieren un mantenimiento constante en el que no solo se pueda supervisar su correcto funcionamiento, sino que además necesitan un desagote, limpieza y transporte de líquidos de forma periódica. Este mantenimiento, aunque para muchos no pueda parecer necesariamente complejo, en realidad siempre debe ser realizado por profesionales especializados en materia de recolección y transporte de desechos peligrosos, ya que el mal manejo de los mismos no solo puede tener efectos adversos en la salud, sino incluso traer problemas con las entidades encargadas de preservar la salud en nuestro municipio. En Desagotes La Victoria contamos con un equipo de profesionales con años de experiencia en la materia, así como con todos los equipos necesarios para realizar la limpieza, desagote y transporte de residuos que puedas requerir en tu negocio u hogar. Visita nuestro sitio web (desagoteslavictoria.com.ar) para conocer más sobre nuestros servicios así como los canales a través de los que puedes comunicarte con nosotros.